POSIBLE TRATAMIENTO PARA LA HIPOXEMIA


La hipoxemia, también denominada desaturación de oxígeno, es una condición médica caracterizada por la insuficiencia de oxígeno en la sangre que llevan las arterias, y que produce en el paciente una respiración superficial y muy dificultosa. Por fortuna, existen ciertas medidas que pueden tomarse para mejorar los síntomas que produce este problema, y a continuación hablaremos acerca de cuál es el posible tratamiento para la hipoxemia por el que podemos optar.

Cuál es el posible tratamiento para la hipoxemia

Se trata de una serie de medidas o procedimientos que tienen por objeto minimizar las reacciones negativas provocadas por el déficit de oxígeno en la sangre arterial, garantizando que el paciente pueda respirar con normalidad y así conseguir una mejor calidad de vida.

Entre los síntomas que suele presentar el paciente con hipoxemia tenemos: dolor de cabeza, piel azulada, entumecimiento, letargo, falta de aire, náuseas, problemas de la vista, entre otros.

Las causas pueden ser múltiples y el diagnóstico de las mismas es indispensable para determinar el tratamiento para la hipoxemia que resulte más efectivo para cada paciente. Así, el objetivo será atacar el factor o problema subyacente, considerando la severidad de la situación y cuidando siempre la salud del afectado.

Ahora bien, en líneas generales, el tratamiento para la hipoxemia puede incluir el uso de terapias con oxígeno, lo cual será necesario principalmente en aquellos momentos en los que la persona deba realizar algún deporte o actividad física. Asimismo, puede implicar la rehabilitación pulmonar, basada en ejercicios de fortalecimiento y cambios alimentarios, la cual está especialmente indicada para aquellos pacientes que han desarrollado la hipoxemia por causa de condiciones como la EPOC.

Otro posible tratamiento para la hipoxemia

Además de lo anterior, existen casos en los cuales la hipoxemia viene dada por una neumonía bacteriana, ante lo cual el médico puede recetar la administración de ciertos antibióticos, ya sea por vía oral o intravenosa, cuya dosis dependerá del riesgo que represente la infección y del grado de hipoxemia.

Como se puede ver, cada problema o causa subyacente amerita un tipo de tratamiento para la hipoxemia en particular, de modo que será necesario acudir a un especialista, a los fines de recibir las indicaciones correctas.